Tu imagen es vital en una entrevista personal para optar a un puesto de trabajo


El hombre invisible no existe, te ves y te ven, asegúrate de que transmites lo que quieres, sobretodo en situaciones decisivas.


Es obvio que para optar a un puesto de trabajo, debes haber trabajado años para tener la formación adecuada, presentar un curriculum bien estructurado, se valorará tu experiencia laboral, idiomas, etc. Pero un momento decisivo es la entrevista personal con un representante de la empresa, donde se van a valorar numerosos factores que debes conocer y controlar.


Pasear por una calle cualquiera un día tal como hoy, y dejar que la mirada vague a nuestro alrededor, puede ser un estudio de la imagen apasionante. Pero antes de hablar de nuestra imagen empezaremos por observar la de los demás.


Observemos a ese hombre del maletín negro, con un traje de alpaca gris azulado. Quizá se dedique a la abogacía y se disponga en este preciso instante a visitar a un cliente.
Fijémonos en esa mujer con un serio uniforme azul marino, pañuelo blanco al cuello. Parece ser una azafata de congresos camino del recinto ferial.
Prestemos atención a ese joven vistiendo unos vaqueros viejos, cazadora de piel y apuntes bajo el brazo. Quizá esté en su último curso de carrera universitaria.
Una joven saluda a un chico, apoya la mano en su brazo, murmurando algo, se abrazan y se alejan calle abajo…

 

Hemos observado sin decir una sola palabra y, sin embargo, es como si cada peatón nos hubiera proporcionado una gran cantidad de información sobre sí mismo (edad, empleo, estilo de vida…). Sin saberlo, sin ser conscientes de ello, hemos recopilado numerosa información sobre los individuos con los que nos hemos cruzado, y sin haber pronunciado palabra, existe comunicación. En el metro, en el autobús, esperando a que el semáforo se pusiera en verde, en la cafetería tomando café, en el ascensor… Es decir, no es preciso hablar para comunicar.


Previo a la entrevista de trabajo


En la medida de lo posible, recopila información sobre la empresa, su trayectoria, sus productos, apariciones en prensa, nuevos productos lanzados recientemente, etc.

Intenta descansar, para levantarte con tiempo y no vayas apurado a la entrevista, ni con rasgos de cansancio en tu cara ni en tus ojos que pueden afectar, no solo a tu actitud, sino también a la expresividad de tus gestos y mirada. Debes ir con tiempo y relajado. La puntualidad es imprescindible y se presume de antemano.

La vestimenta que vayas a elegir, bajo una premisas, debe ser al menos la noche anterior, así el día de la entrevista no dedicarás tiempo a este aspecto.
No estrenes nada para la entrevista, sobretodo evita estrenar zapatos.

Visualiza la imagen ideal del candidato al puesto para el que te presentas, y haz el esfuerzo de hacerlo desde el punto de vista de empresa.

Además de la vestimenta, el total de tu imagen personal se transmite con tu actitud, tus gestos, el tono de tu voz… estos temas los trataremos en sucesivas publicaciones.

 

¿Qué es ir bien vestido?


Los códigos del buen gusto y de la elegancia no son universales, cambian según la edad, el nivel cultural, la sociedad, la época. Lo que está claro es que no es sinónimo de belleza. La elegancia es armonía, el ir adecuado a cada situación. No se trata de pasar desapercibido ni de ir siempre a lo clásico. Se trata de que la imagen que transmitimos sea coherente que nuestra actitud y todo ello, un complejo conjunto transmite una sensación, por la que nos recordarán.

 

Debes evitar colores estridentes, que no te recuerden por el color de tu falda o de tu corbata. Si vas a optar a un trabajo de oficina, de dirección… el traje d chaqueta con corbata se impone, los zapatos relucientes, calcetines oscuros. A menos de que el calor sea sofocante, siempre usa camisa de manga larga con gemelos o cubre botones. Evita el sujeta corbatas y los pañuelos en el bolsillo de la chaqueta.

 

El pelo llévalo con tu estilo, pero cuidado y peinado. En el hombre se deben evitar pulseras, anillos, cadenas o colgantes. Si el calor es sofocante, como puede ocurrir en verano en Andalucía, si vas a llegar sudado, es mejor optar por un clásico pantalón de pinzas y un polo, antes de llegar como una pasa. No uses nunca camisas de manga corta.

 

En la mujer el abanico de posibilidades es más amplio. No uses minifalda, decántate por traje de corte clásico, ya sea pantalón o de falda. Recuerda que no debes renunciar a tu femineidad, y huye de una imagen andrógena si no es la que te hace sentir cómoda. El zapato de tacón es el ideal, si te resulta incómodo ponte de medio tacón (5cm) que puede tener el mismo efecto. Maquíllate, pero discreta, sin abusar de la base de maquillaje, de las sombras y de las barras labiales de colores fuertes. Usa tonos tierra y naturales.

 

Nunca entres con guantes, sombrero, fumando o con gafas de sol. Procura usar un perfume suave. Hay gente muy sensible a los olores fuertes y no conviene que le dejes perfumado el despacho a tu entrevistador durante horas.